La Importancia de la Correcta Instalación para los Forros de Freno Tejidos
Incluso el forro de freno tejido sin amianto de la más alta calidad fallará si no se instala correctamente. La instalación adecuada es fundamental para garantizar el máximo contacto superficial, un desgaste uniforme y la seguridad a largo plazo del sistema de frenado. El proceso comienza con la limpieza a fondo del tambor o banda de freno para eliminar todos los rastros de material de fricción viejo, grasa y óxido. Cualquier contaminación en la superficie de contacto puede provocar puntos calientes localizados o una reducción significativa del coeficiente de fricción. Como fabricantes, proporcionamos guías de instalación detalladas con nuestros productos para ayudar a los equipos de mantenimiento a lograr los mejores resultados posibles y prolongar la vida útil de sus equipos de frenado.
Al instalar el forro tejido en una banda de freno, es esencial asegurarse de que el forro esté apretado contra la superficie metálica. Cualquier espacio entre el forro y la banda puede hacer que el material se flexione y, eventualmente, se agriete durante las operaciones de frenado. La mayoría de los forros tejidos industriales se aseguran con remaches, y el patrón y la tensión de estos remaches son cruciales. Recomendamos comenzar desde el centro del forro y trabajar hacia los extremos para asegurar que cualquier holgura se empuje hacia afuera. Usar el tamaño y material correctos para los remaches, generalmente latón o aluminio, también es importante para evitar daños en el tambor de freno en caso de que el forro se desgaste hasta el nivel de las cabezas de los remaches.
Otro factor crítico en la instalación del forro de freno tejido sin amianto es el período de rodaje o asentamiento. Cuando se instala un forro nuevo, inicialmente no hace un contacto del 100 por ciento con el tambor de freno debido a irregularidades microscópicas en ambas superficies. Durante las primeras horas de funcionamiento, el freno debe usarse suavemente para permitir que el forro se desgaste y se adapte perfectamente al tambor. Este proceso crea una superficie de fricción uniforme y ayuda a estabilizar el coeficiente de fricción. Omitir este paso o someter el forro nuevo a una carga completa de inmediato puede provocar el acristalamiento de la superficie y daños permanentes al material, reduciendo su efectividad general y vida útil.
La alineación de la banda de freno también es una consideración clave durante la instalación. Si la banda no está perfectamente alineada con el tambor, el forro se desgastará de manera desigual, con un lado soportando más carga que el otro. Esto no solo reduce el par de frenado, sino que también hace que el forro se desgaste prematuramente en un lado. Los equipos de mantenimiento deben verificar regularmente la alineación y la holgura entre el forro y el tambor cuando el freno está desacoplado. La holgura adecuada es esencial para evitar el arrastre, que genera calor y desgaste innecesarios incluso cuando el freno no está en uso. Nuestro equipo de soporte técnico siempre está disponible para brindar asesoramiento sobre estos ajustes finos para varios tipos de maquinaria industrial.
Como fabricantes, respaldamos la calidad de nuestros forros de freno tejidos sin amianto, pero también enfatizamos el papel del técnico en el rendimiento final del producto. Ofrecemos materiales de capacitación y soporte en el sitio para proyectos industriales a gran escala para garantizar que nuestros forros se instalen con los más altos estándares. Al seguir los procedimientos correctos de instalación y mantenimiento, las empresas pueden maximizar la seguridad y la eficiencia de sus sistemas de frenado, al tiempo que minimizan el costo total de propiedad. Un forro tejido bien instalado es un componente confiable y duradero que proporcionará años de servicio sin problemas en los entornos industriales más exigentes.

